Duque ha dado poca mermelada en puestos pero la que dio es uribista

En los nombramientos del primer mes del Gobierno Duque por debajo del rango de ministros y viceministros hay pocos políticos, pero los que hay son uribistas.

Durante el primer mes de gobierno de Iván Duque, el Gobierno nombró 202 personas en cargos directivos y asesores de alto nivel, pero inferiores a viceministros, según las hojas de vida publicadas en la página de aspirantes de la Presidencia.

De esas, solo 29 tienen antecedentes políticos y 14 de ellos han tenido algún nexo con el uribismo, lo que muestra que sí hay mermelada pero poca.  

Son personas que han trabajado con políticos de diferentes corrientes políticas, pues han sido asesores de congresistas, de políticos veteranos de regiones, miembros relevantes de campañas o directamente candidatos.

• Entre ellos están el ingeniero Mario Duque Carvajal, nuevo asesor del Ministerio de Vivienda, quien trabajó tres años en la Gobernación del Valle del conservador Ubeimar Delgado y hasta este año fue asesor del alcalde Maurice Armitage y dos políticos en el Valle lo relacionaron como aliado del excongresista conservador Santiago Castro.

• La abogada Diana Margarita Londoño, nueva asesora del despacho del Ministro de Transporte, trabajó de febrero a junio de este año como contratista del Centro Democrático y el año pasado fue asesora política del exprecandidato uribista Rafael Nieto y fue miembro de la UTL del representante Samuel Hoyos.

• El abogado Camilo Quiroz Hinojosa, nuevo asesor del viceministro de saneamiento en Vivienda, trabajó por varios meses en tres ocasiones diferentes en la Cámara, fue candidato a la Personería de Valledupar en 2015 y delegado del Consejo Nacional Electoral para las regionales de ese año.

Que sean apenas uno de cada quince contratados muestra que la promesa de Duque de no entregar puestos a partidos políticos y mantener técnicos tiene mucho de cierto, como muestra la frágil coalición que logró en el Congreso.

170 pintan técnicos. Son personas que han trabajado con los gobiernos anteriores o de largas trayectorias públicas o privadas.

• Por ejemplo Sulma Gutiérrez, nueva asesora de la Ministra de Cultura, quien duró 25 años como asesora y abogada en el Ministerio del Interior; Diana Mejía, nueva asesora de la Cancillería, quien lleva 20 años en carrera diplomática; o Piedad Montero, nueva directora de información y tecnología de Bienestar Familiar, quien lleva dos décadas trabajando en temas TIC y gerencia informática.

• De los 202 contratados hasta el 7 de septiembre, 10 tienen doctorado, 4 cuentan con MBA y al menos 10 tienen estudios de posgrado en el exterior.

16 de los 30 vienen del uribismo o de aliados del Gobierno, por lo que esa poca mermelada es uribista. 

(Después del primer mes fueron publicadas las hojas de vida de Esteban Jaramillo y Paola Castellanos, que van respectivamente para el Ministerio de Justicia y la Superintendencia de Salud y trabajaron en las UTL de los congresistas del Centro Democrático Samuel Hoyos y Álvaro Uribe).

De esos tres son quemados. Tres nuevos funcionarios en cargos directivos del Ministerio del Interior y del DPS se quemaron en las pasadas elecciones al Congreso e integraron las listas a la Cámara de Cesar, Cundinamarca y Valle del Centro Democrático.

• Uno es el exconcejal cesarense Jaime Andrés Mejía, hoy asesor de la Ministra del Interior. Viene de ser candidato del Centro Democrático a la Cámara y antes fue candidato vargasllerista a la Alcaldía de Valledupar.

• En Interior también está la exalcaldesa Hilda Gutiérrez, directora de Participación y Democracia, una política de carrera que en marzo se quemó por segunda vez en su aspiración por llegar a la Cámara por Cundinamarca por el uribismo y fue alcaldesa de La Mesa en 1995. Ella ha militado en el Centro Democrático desde la creación del partido, y fue la coordinadora en Cundinamarca de las campañas a la Presidencia de Óscar Iván Zuluaga en 2014 y a la Gobernación de la hoy Ministra, y jefa suya, Nancy Patricia Gutiérrez.

• En DPS está como director de infraestructura el caleño Carlos Bernal Díaz, quien hizo parte de la lista a la Cámara que armó la entonces jefe uribista del Valle, Susana Correa, hoy directora de esa entidad. Luego de quemarse en la Cámara trabajó tres meses en una UTL que una fuente que lo conoce nos indicó que era la de la entonces senadora Correa.

(El número de aspirantes quemados en el Gobierno podría subir en las próximas semanas: según nos dijo un excandidato del Valle está aplicando a otro cargo del Estado, sin decirnos cuál).

Seis vienen de ser asesores de uribistas: Además de Carlos Bernal y Diana Londoño, hay otros tres contratados en altos cargos que trabajaron en el último cuatrenio en las Unidades de Trabajo Legislativo (UTL) de congresistas uribistas, incluida la que tenía el hoy Presidente:

• La comunicadora social Carolina Náder, nueva directora de acompañamiento familiar del Departamento para la Prosperidad Social, quien trabajó los últimos cuatro años con el senador uribista Fernando Nicolás Araújo.

• El economista Juan Camilo Giraldo, nuevo jefe de planeación de Colciencias, quien de 2014 a 2016 hizo parte de la UTL del hoy presidente Iván Duque.

• La administradora Victoria Jiménez, nueva directora territorial del Dane, trabajó cuatro años en la UTL de la senadora uribista María del Rosario Guerra, quien como contamos es muy amiga del director de esta entidad.

• El abogado Nicolás Torres Bolívar, nuevo asesor del despacho de la Ministra TIC, viene de ser asesor de la concejal uribista de Bogotá, Ángela Garzón.

Tres trabajaron con aliados no uribistas de Duque: Otros dos funcionarios del Ministerio de Transporte y del Dane estuvieron en las UTL de congresistas de partidos de la coalición de Gobierno:

• El abogado Pedro Pablo Jurado, nuevo asesor de despacho del Ministerio de Transporte, fue secretario privado del Senador de La U, el hoy uribista José David Name, cuando fue presidente del Senado entre 2014 y 2015 y quien, como contamos, fue uno de los componedores de la coalición entre su Partido y el Uribismo.

• La economista Karen Chávez Quintero, asesora grado 8 del Dane, trabajó en 2016 como asesora del hoy exrepresentante Telésforo Pedraza del Partido Conservador, el primer Partido que se declaró de Gobierno.

• El abogado Álvaro Ávila Silva, asesor del despacho del Ministro de Hacienda, fue entre 2008 y 2011 director de campañas del partido Mira y entre 2012 y 2014 secretario de despacho y jefe de control interno de la Gobernación de Caquetá, que en esas regionales ganó ese Partido.

• El abogado José Mario Ovalle, nuevo asesor del Ministerio de Vivienda, fue asesor del concejal barranquillero Juan Camilo Cifuentes, del Partido Conservador y miembro del grupo político del senador Efraín ‘Fincho’ Cepeda.

(También encontramos dos personas que habían trabajado con los senadores Luis Fernando Velasco y Bernabé Celis en 2014 y 2006, respectivamente).

Y tres estuvieron vinculados (directa o indirectamente) a campañas uribistas recientes:

• Andrés Gallego, exdirectivo del Centro Democrático y exgerente de un comité del No en el plebiscito. Es subdirector de la agencia inmobiliaria Virgilio Barco.

• Ángela Ospina de Nicholls, conservadora que fue candidata al Senado en 2014, compromisaria de Andrés Pastrana para armar la coalición uribista y ahora directora de la oficina de cooperación internacional de la Presidencia.

• Betty Rodríguez, quien donó 30 millones de pesos a la campaña de Iván Duque, entró a la Cancillería y venía de una empresa privada.

Curiosamente, también hay dos cercanos a rivales de Duque en las presidenciales: dos nuevos funcionarios del Ministerio de Justicia y del de Vivienda vienen de trabajar en el primer círculo de las campañas presidenciales no uribistas: uno en la campaña presidencial de Humberto de la Calle y otro en la de Sergio Fajardo, respectivamente.

Interior y Vivienda son los Ministerios que más contrataron: en el primer mes, el Ministerio en cabeza de Nancy Patricia Gutiérrez contrató 20 funcionarios de alto nivel y el de Vivienda de Johnatan Malagón, 19. En proporción con contrataciones de personas con antecedentes políticos, el DPS ha contratado más personas que trabajaron con políticos (40%), le sigue la Inmobiliaria Virgilio Barco (33%), Colciencias (33%) e Interior (una cartera típicamente política, con el 30%), en comparación con el Icbf que tiene 19 nombramientos y ninguno con antecedente político.

Los ministros se rodean de sus aliados: Los ministros de Defensa, Justicia e Interior han contratado exfuncionarios con los que han trabajado en sus gremios y entidades que manejaban antes de su nombramiento.

• Guillermo Botero se llevó de Fenalco, el gremio que dirigió hasta agosto de este año, al Ministerio de Defensa su asesora en la Vicepresidencia y a su director de Asuntos Públicos.

• Gloria María Borrero se llevó para el Ministerio de Justicia a tres personas que fueron investigadores en la Corporación Excelencia para la Justicia para cargos directivos y de asesoría.

• Nancy Patricia Gutiérrez se llevó a tres funcionarios de confianza en Asomovil, el gremio de operadores móviles que dirigió al Ministerio del Interior: la exdirectora jurídica (quien había trabajado con ella en su UTL en el Senado y la Cámara), el exdirector de regulación y el exdirector de asuntos legales; también contrató a su secretaria privada cuando fue Presidenta del Senado en 2007.

Ni tan santista que queme al santo, ni tan uribista que no lo alumbre: 82 nuevos funcionarios vienen de trabajar en el gobierno de Juan Manuel Santos y solo otros 13 trabajaron en algún momento de los dos gobiernos de Álvaro Uribe pero no trabajaron en los de Santos, lo que muestra que Duque no solo ha dejado a funcionarios que trabajaron en el anterior Gobierno en altos cargos como contamos, prueba de ello es que el saliente director del Invías, Carlos García, ahora es vicepresidente de la ANI.

Esto refuerza una de las causas de la molestia con el Presidente en la base uribista, que contamos ayer.

• Otros 40 funcionarios han trabajado en ambos gobiernos, en diferentes periodos y en distintas entidades públicas.

• 48 de los nuevos funcionarios no habían trabajado en el sector público, ni tampoco con políticos.

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